Los mejores alimentos que podemos comer para evitar caer resfriados son los albaricoques, melón, frutos cítricos (como limones y limas), arándanos, mangos, papayas, melocotones y fresas que son, todos ellos, una
buena fuente de vitamina A y de vitamina C o incluso de ambas. Las mejores hortalizas son los espárragos, brócoli, coles de bruselas, zanahorias, berzas, col rizada, lechugas (excepto las iceberg), mostaza, calabacines, pimientos morrones, batatas, calabazas, espinacas, nabos y gran parte de los diversos brotes o retoños de las semillas y los cereales; la mayoría son ricos también en vitaminas A y C.
Por otro lado el zinc también es muy importante para el sistema inmunológico. Recientes estudios demostraron que las personas que consumían zinc antes de resfriarse se recuperaban del mismo un día antes de media que los que no lo hacían. Son buenas fuentes de zinc: las palomitas de maíz sin mantequilla, las batatas, la mayoría delos frutos secos, las semillas y cacahuetes, las judías verdes,lentejas, germen de trigo, salvado de trigo, la levadura de cerveza o la levaduras nutricionales que pueden espolvorearse sobre un plato de cereales. El aceite de hígado de bacalao también es una fuente rica en vitaminas A y D, mientras que la mayoría de las legumbres y los cereales integrales suministran vitaminas del complejo B y vitamina E.
El fisiólogo húngaro Albert Szent-Györgyi, un eminente científico y ganador del premio Nobel, fallecido recientemente a los 93 años, publicó que desde el momento en que empezó a tomar un cuarto de taza de germen de trigo con el desayuno diario unos años atrás, no sufrió ni un solo resfriado. El germen de trigo es una fuente abundante de zinc, así como de vitamina E y manganeso.
Otro punto a tener en cuenta es la preparación de estos alimentos, así por ejemplo la cocción puede destruir la vitamina C y otras vitaminas de los mismos, por lo que debemos comer cuantos alimentos sea posible crudos y frescos. Por parecidas razones, debemos evitar todos los alimentos enlatados, manipulados, elaborados, precocinados o deshidratados. Y si finalmente los cocinamos, debemos hacerlo al vapor, a la parrilla, hervidos o estofados, pero no fritos.
Una observación importante: las judías secas contienen zinc, pero sus fitatos inutilizan parte del mismo, por lo que debemos asegurarnos de mantenerlas en remojo durante toda la noche antes de cocinarías para eliminar el fitato.
Es importante no olvidar tampoco que con la vitamina C del zumo de naranja y de otros zumos se destruye fácilmente al resfriado, siempre y cuando no este deshidratado o enlatado. De ahí que la cantidad real de vitamina C que contienen la mayoría de los zumos de naranja o pomelo envasados es tan bajo que resulta decepcionante. En lo posible, deberemos prepararnos nosotros mismos los zumos exprimiendo frutas y vegetales frescos, o comiendo esas mismas frutas o vegetales sin preparar. Como los zumos de frutas son también ricos en azúcares, que se absorben y pasan rápidamente a la corriente sanguínea donde producen una elevación del nivel de azúcar en la sangre, es conveniente consumirlos a pequeños sorbos y lentamente, sin engullirlos de una vez.
Y tu, ¿que alimentos consumes para evitar el resfriado?
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